Nuestro origen y el sentido de la pertenencia es algo que define parte de lo que somos, y carecer de ello puede llevar a cuestionamientos sobre la identidad, como ocurrió en el caso de Mewtwo, uno de los personajes más interesantes de Pokémon.
Mewtwo, y específicamente el primero visto en el anime, es un clon del mítico pokémon Mew creado por el Dr. Fuji por encargo del Equipo Rocket, dado que su líder Giovanni buscaba hacerse con el pokémon más poderoso de todos.
Mientras era creado su mente entró en un estado de conciencia colectiva, encontrándose con otros pokémon clonados del mismo laboratorio y con Ambertwo, un clon de Amber, hija del Dr. Fuji que falleció siendo una niña.
Desde su creación Mewtwo siempre tuvo cuestionamientos sobre su origen, y sobre qué era él en específico, y al conocer que fue creado para ser un arma se rehúsa a que este sea su destino, decidiendo destruir el laboratorio en el que nació, y escapando.
Tras esto, Giovanni lo encuentra y le propone una especie de sociedad, por lo que Mewtwo se une al Equipo Rocket para ayudarlos a capturar pokémon y funge como el pokémon más fuerte del gimnasio de Ciudad Verde.
No obstante, con el tiempo se daría cuenta de que solo estaba siendo utilizado por Giovanni, por lo que terminaría escapando nuevamente, desarrollando tras esta mala experiencia un odio intenso por la humanidad.
Esto lo motivó a buscar demostrar la superioridad de él y de los pokémon clonados, aunque luego, gracias a la ayuda y guía de Mew, lograría comprender que nuestro origen no es lo único que nos define, sino que lo que hacemos también hace quienes somos, enmarcándolo en una gran frase.
"Las circunstancias en que uno nace no tienen importancia, es lo que uno hace con el don de la vida lo que nos dice quienes somos".
Mewtwo es uno de los pokémon más interesantes y complejos en cuanto a historia, y afortunadamente el anime, pese a que adapta mal varias cosas de la franquicia, logró crear un increíble trasfondo en torno al personaje.